¿Te ha pasado a ti? A mi si…

NO SEAS UN CUBO DE BASURA

¿Te resuena verdad?

¿Cuántas veces  te levantas con alegría, llena de ilusión?…, hasta que recibes una llamada o se cruza en tu camino una persona y al irse, sientes como si un camión te pasó por encima.

Pues sí, acertaste, te dejo su camión de basura en tu cabeza…

Pero, no te preocupes, nos pasa a todos, pasa hasta que entiendes la mecánica,  hoy te voy a dejar unos consejos para seguir escuchando y no te afecten las malas noticias.

Recuerdo un día en un retiro en el Monasterio de San Juan de la Cruz en la ciudad de Segovia, le pregunte al padre Saturnino como hacía para que no le afectaran los problemas que tantas personas depositan en un confesionario. —Me comento que al principio le afectaba personalmente escuchar las penas de los demás, hasta que «otro sacerdote» le dio este consejo: Saturnino, tú solo tienes que oír, —no escuchar— cuando terminen de contar, manda la penitencia y ya está. Saturnino intentó hacerlo así, pero seguía afectándole lo que le contaban, —seguía escuchando con el corazón, se implicaba, daba consejos, no podía evitarlo. Entonces una noche tuvo un sueño, vio un globo gigante, le permitía escuchar, ver, —entendió el mensaje—, y desde aquel día así lo hizo. Cada vez que entraba al confesionario se metía dentro de un globo, y a la vez creaba en su mente un inmenso globo. Mientras Saturnino escuchaba con atención a cada persona descargando sus penas, pecados,  él lo iba depositando dentro del globo. Al finalizar el día, el soltaba el globo y se quedaba observando como subía hacia el cielo.  Saturnino pedía que todas las penas, pecados se desintegraran en el infinito… Aprendió a «escuchar» sin que le afectara, porque comprendió que todos los seres humanos necesitamos descargar con quien sea la mochila de problemas, cargas emocionales para aliviar nuestro corazón y quizás nuestra consciencia de actos denigrantes, para poder seguir viviendo, —dicen que las penas compartidas, pesan menos.

En ese seminario aprendí a escuchar sin más, sin juzgar, sin buscar respuestas mientras el otro te está hablando.

El padre Saturnino me enseño que todos deberíamos tener dos globos para salir al mundo, un globo para depositar las malas noticias y el otro globo para protegerte, —que todos te vean, pero no entren a tu espacio vital— porque siempre encontraremos personas que tienen necesidad de vaciar su cubo de basura, y así no te afectarán los problemas de los demás.

Gracias a esta herramienta he podido transitar como voluntaria por asociaciones como https://www.aecc.es/es  Es muy duro ver morir a todo tipo de personas, esta enfermedad no respeta edad, cultura, religión, creencias. Ahí simplemente los voluntarios, somos un apoyo: escuchando miles de historias, vacían sus recuerdos y vivencias en nosotros. Una sonrisa, un abrazo, una mirada de complicidad donde empatizamos con el enfermo y los familiares;  un café, una revista, un caramelo…, paseando con nuestro carrito ofreciendo nuestro lado más humano.  Comprendemos su dolor, transmitimos fuerza para luchar, y estar un ratito más por aquí… Porque la vida no la valoras hasta que comprendes que este viaje está a punto de finalizar.

Como sabéis, regente más de cuarenta y cinco años mi centro de estética en Alicante, —en mi libro lo comento con más detalle— os podéis imaginar en una cabina de estética lo que millones de esteticistas escuchamos, —somos una tumba, secreto profesional. Gracias a esta especie de terapia, millones de mujeres y hombres descargan su mochila y cuando dejan la cabina, salen más aliviados, al margen de más guapos. Hoy puedo contar que se crea un hilo conductor muy especial entre la Esteticista y sus clientes. Por eso afirmo que la sociedad sigue sin valorar el trabajo Terapéutico Sicológico de esta maravillosa profesión.  Hablar de nuestros problemas con amigos o familiares nos evita tener depresiones u otras patologías.

Deberíamos ser más solidarios y simplemente aprender a escuchar dentro de nuestro globo, porque puede que un día, nosotros necesitemos que alguien nos escuche también… 

En mis más de cincuenta años de profesión, aprendí que quien busca ayuda, escucha y ejecuta los consejos. Los demás, ancho es el mundo para todos…

Espero te haya gustado mi breve consejo de hoy.

Si te gustó, compártelo con tu entorno.

GRACIAS, GRACIAS, GRACIAS.

Más información:

Skype: rosairazuste

Email: imixuuk1948@gmail.com

Web: http://www.metamorfosiscelular.amawebs.com/

Reflexiones De Vida

Deja una respuesta

Por favor, inicia sesión con uno de estos métodos para publicar tu comentario:

Logo de WordPress.com

Estás comentando usando tu cuenta de WordPress.com. Salir /  Cambiar )

Foto de Facebook

Estás comentando usando tu cuenta de Facebook. Salir /  Cambiar )

Conectando a %s